martes, 15 de diciembre de 2015

El arte Mudéjar

Concepto
Patio de las Doncellas del Alcazar de Sevilla
Denominamos mudéjares a las expresiones artísticas producidas por la población de origen musulmán en territorio hispano luego de la reconquista; que fue el proceso de recuperación, para el cristianismo, del territorio de la península ibérica dominado por los musulmanes entre los siglos VIII y XV. Es, entonces, un arte cristiano que ha asimilado diversas formas y conceptos del arte islámico estructurándolos de manera armónica. El término mudéjar deriva de la voz árabe mudayyan que significa sometido, en alusión a las poblaciones que lo produjeron. 

Catedral de Teruel
Es un estilo típicamente español, pero dado que era realizado por habitantes de origen musulmán convertidos forzosamente, conservó formas y ornamentos moriscos, en ese sentido, abstractos o geométricos, aplicados a temas de tradición cristiana, aunque incorporó también elementos figurativos como temas sacros, imágenes de santos y diversos motivos de origen occidental. Si pretendiéramos entender las razones del surgimiento y posterior florecimiento del arte mudéjar en la península, deberíamos tomar en cuenta las diferencias culturales de las distintas tradiciones presentes en ella: los cristianos poseían la herencia visigoda, un arte de poca elaboración, mientras que, por el otro, la población islámica disponía de una tradición artística muy refinada.

Alcalá de Henares. Paraninfo
Las obras arquitectónicas islámicas como los alcázares, que fueron convertidos en palacios, o las mezquitas, transformadas en templos cristianos; causaron el asombro de los cristianos. Finalmente también fue importante la influencia cultural que ejerció el reino de Granada que permaneció bajo el poder islámico hasta 1492.

Características
Palacio de Pedro I. Sevilla
El arte islámico le aportó al mudéjar sus conceptos, materiales y tecnologías. De ese modo se incorporó el sentido ornamental. Los elementos decorativos y expresivos constituyen parte importante de las manifestaciones mudéjares, llegando incluso a cumplir un rol primordial en su constitución; debemos subrayar además, que los elementos formales son factores fundamentales de las manifestaciones artísticas del Islam y esa característica se hizo extensiva al arte mudéjar, sobre todo en el interior de los espacios arquitectónicos antes que en los exteriores correspondiendo, de alguna manera, con el principio de darle mayor importancia al interno en los seres y las cosas. Es importante también tener en cuenta los principios compositivos de su ornamentación, tales como la estructuración en repeticiones rítmicas, la tendencia al revestimiento total de la superficie o el diseño que utiliza patrones sin límites espaciales.

Muro de ladrillo con decoración mudèjar
La arquitectura mudéjar incorporó materiales hasta entonces asumidos como de menor calidad o jerarquía, generalizó el uso del ladrillo, el yeso, la cerámica y, sobre todo, la madera, los cuales se constituyeron en materiales de construcción esenciales integrados en un sistema de trabajo que fomentaba la especialización de la mano de obra, llegando a un dominio técnico de alta precisión.

El uso del ladrillo fue fundamental en la arquitectura mudéjar, pero le fue asignado no solo un rol estructural, sus alarifes supieron contrarrestar la monotonía de los paños construidos mediante su uso en formas geométricas repetitivas, arcos entrecruzados y estrellas combinados con fenestraciones de arcos de formas diversas.

El yeso, por su versatilidad y facilidad para el trabajo, fue muy usado para las decoraciones. Las yeserías adquirieron tanto formas vegetales (atauriques), como celosías, elementos geométricos (lazos y estrellas), heráldicos, caligrafías (cúficos y nesjies) y diversos estucos con los que se recubrían zonas muy amplias de los muros.

Azulejos de los muros del
claustro mayor de
San Francisco de Lima
La cerámica vidriada fue uno de los materiales más usados para el recubrimiento de superficies sobre todo con las llamadas azulejos, nombre que deriva del árabe az-zulaiy, que significa barro vidriado; y no del uso del color azul en su decoración, como a veces se cree.

Techo del salón de embajadores
del Alcázar de Sevilla
Fue la madera el material que los artistas mudéjares manejaron con la mayor exquisitez; usada para la elaboración de mobiliario, puertas y ventanas; pero, por sobre todo, para labrar techos con una técnica constructiva de piezas unidas sin clavos denominada machihembrado. Este consiste en labrar piezas apuntadas y rebajadas alternativamente que encajan perfectamente, para lograr diseños muy complejos. 

Par y nudillo, Huaro, Cusco, Perú
La madera fue usada en techumbres con diversos sistemas constructivos, algunos techos fueron planos (alfarjes) y otros curvos (bóvedas y cúpulas). En todos los casos era esmaltada con lo cual se resaltaba las formas del labrado. Entre los principales sistemas tenemos:

- El par y nudillo, que consistía en una serie de dos maderos oblicuos unidos y asegurarlos con uno tercero a modo de tensor que los estabilizaba, sobre el cual se colocaba la cubierta asumiendo exteriormente la forma de techumbre de dos aguas.

- El artesonado, que es un conjunto de piezas de forma poligonal, labradas en profundo. Sus formas suelen ser cuadradas u octogonales, aunque en otros de formas variadas, incluso estrelladas; unidas formando una trama uniforme. Se les incorporaba elementos en el interior, como piñones o pinjantes.

Lacería en el crucero del templo
de San Francisco, Quito, Ecuador
- La lacería, que consiste en un entramado de trozos de madera labrada, unidos simulando un entretejido, en muchos casos integrado con artesones. Es el sistema que permite las formas más complejas y de mejor efecto decorativo.

En el plano de los elementos arquitectónicos mudéjares encontramos numerosas torres-campanario, formadas por un primer cuerpo de alminar al cual se le ha superpuesto, en la parte alta, un cuerpo adicional de campanas, como en el caso de la torre de la catedral de Teruel.

Las manifestaciones del arte mudéjar llegaron a América con la conquista española, produciendo, en estas tierras, una gran cantidad de obras artísticas de gran calidad, sobre todo durante el S. XVI, por lo cual muchas han desaparecido. Sobre algunas de las que sobreviven hablaremos en futuras publicaciones.

Textos: Carlos Cosme


2 comentarios:

  1. Muchas gracias por compartir conocimientos, Arquitecto Cosme.

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